El Ayuntamiento de Terrassa incrementa las medidas para hacer frente a la situación de sequía
Se activa el Plan de Emergencia Municipal ante la posibilidad de que se declare la fase de emergencia 1 a finales de año o inicios de 2024
El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, presidió esta mañana el Comité Municipal de Emergencia, que se ha convocado ante el agravamiento de la situación de sequía, durante el cual se ha activado en alerta el Plan de Emergencia Municipal . Según ha explicado el alcalde, «nos encontramos en una situación de sequía extrema, con los embalses al 18 por ciento de su capacidad, y es esencial actuar con urgencia para garantizar la disponibilidad de agua. Cambiar los hábitos de consumo es clave para evitar restricciones en el municipio y nuestra meta es aprovechar al máximo las escasas reservas disponibles y, si no llueve próximamente, avanzar en el estado de emergencia antes de que los embalses lleguen al 16%, con nuevas medidas de ahorro».
Asimismo, el alcalde ha querido agradecer «el comportamiento ejemplar de la ciudadanía, que hasta ahora ha respondido de forma responsable y solidaria ante las primeras alertas. Es motivo de orgullo ver cómo, ante la adversidad, nos unimos para preservar uno de los recursos más esenciales». Y es que Terrassa es uno de los municipios más ahorradores del sistema del Ter-Llobregat, ya que su consumo total está por debajo del límite establecido por el Govern, con 182 litros por persona y día. Y si tenemos en cuenta sólo el consumo doméstico, en Terrassa se sitúa en torno a los 96 litros por persona y día. Sin embargo, el Gobierno local pide continuar con el esfuerzo común para seguir disminuyendo esta cifra y garantizar la sostenibilidad de este recurso.
Desde su activación en febrero de 2022, el Comité Municipal de Sequera se ha reunido periódicamente para evaluar la situación y tomar acciones concretas en cada fase. En este sentido, algunas de las medidas más destacadas han sido la limitación del uso del agua por los servicios municipales, consiguiendo un ahorro del 60% en los consumos, especialmente en el uso del riego, el vaciado de fuentes ornamentales y con la prohibición del uso del agua a presión para la limpieza de las calles, entre otros.
Por otra parte, la empresa pública de suministro de agua, TAIGUA, lleva unos días realizando pruebas para reducir la presión en la red de distribución y también ha implementado un nuevo sistema de detección de fugas. Asimismo, se contempla un aumento significativo de las inversiones en 2024, con tres millones de euros que se destinarán a la sustitución y reparación de la red para minimizar las pérdidas y mejorar la eficiencia hídrica.
Otra de las medidas más destacadas es la reestructuración de la nueva tarifa de agua que entrará en vigor en 2024, considerando el número de personas empadronadas en cada vivienda y estableciendo tramos de consumo más restrictivos. «Queremos premiar el ahorro y la responsabilidad, por lo que aquellos que derrochan verán aumentar sus facturas, mientras que los que ahorren podrán disfrutar de tarifas más bajas. Cada gesto de ahorro cuenta», ha explicado la concejala de Ciclos del Agua, Patricia Reche. Esta iniciativa se complementa con mejoras en las condiciones sociales de acceso al agua.
Paralelamente, el Ayuntamiento está estudiando nuevas fuentes de agua freática y explorando el posible uso de agua regenerada de la depuradora para usos no potables. Esta tarea se está llevando a cabo con la complicidad de la Agencia Catalana del Agua (ACA), que está estudiando traspasar la gestión de la depuradora de Les Fonts al Ayuntamiento. Por otro lado, el Consistorio también prepara la presentación de un proyecto a las ayudas europeas Next-PERTE para la digitalización del ciclo del agua, una mejora esencial para controlar consumos y hacer más eficiente el servicio, que supondrá una inversión de ocho millones de euros.
El agua se acaba, cierra el grifo
Para continuar fomentando el ahorro entre la población, el Ayuntamiento ha puesto en marcha una nueva campaña de concienciación ciudadana bajo el lema El agua se acaba, cierra el grifo, que quiere involucrar a cada ciudadano y ciudadana en la labor de preservar ese recurso fundamental.
Esta iniciativa contará con diversos soportes como carteles, opis e imágenes en los autobuses municipales, además de presencia en equipamientos, oficinas administrativas y en las redes sociales municipales.