Empieza el derribo de los bloques incluidos en la última fase del Proyecto de esponjamiento del barrio de Ca n'Anglada

Los trabajos preparatorios por el derribo de los bloques de la Fase 3B se iniciaron el octubre de 2024. En estos meses, se ha procedido a destapiar, delimitar y cerrar el espacio necesario para hacer las obras, retirar el tejado de fibrocemento, a descargar todos los elementos estructurales, entre otros, y también a garantizar la anulación de los suministras de agua, gas, teléfono y otras compañías de servicios.

Estos trabajos van a cargo de la empresa Hercal Diggers S.L, con un presupuesto de adjudicación de 205.413,58 euros, que también incluye la urbanización provisional de los espacios liberados.


Cómo se hará el escombro

El escombro de los dos edificios de la Fase 3B se realizará con una pala excavadora giratoria sobre cadenas de 12 tn a 20 tn. Para evitar el polvo, puesto que los edificios más próximos se encuentran a una distancia máxima de 12 metros, se procederá a rociar continuamente de agua toda la obra. Primero se derribará el entrevigado, sin debilitar las viguetas, y las paredes de cierre se echarán en tierra una vez hecho el derribo de la cubierta.

Los dos edificios tienen una superficie en planta de 565,68m2 y una superficie total de unos 2.825 m², y forman un conjunto edificado con planta rectangular de dimensiones aproximadas de 14,80 m por 38,16 m, formado por planta baja, cuatro plantas, y bajo-cubierta. Cada bloque está formado por 20 viviendas (cuatro por planta), distribuidos en torno a un núcleo de escaleras y sin ascensor.

Una vez con el solar liberado, se hará la urbanización provisional con pavimentos y alumbrado. Se instalarán columnas de luz, en sustitución de las lumbreras de las fachadas y se reposarán todas las zonas afectadas por la actuación, así como los alcorques rotos.

La tercera y última fase

Para ejecutar esta tercera y última fase, el Ayuntamiento de Terrassa y el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, a través de la Agencia de la Vivienda de Catalunya, firmaron el abril de 2017 un convenio urbanístico, que se está llevando a cabo en dos subfases. Inicialmente, se había previsto derrocar estos bloques del pasaje de la Concòrdia (Fase 3A) en 2019, pero se demoró por dificultades sobrevenidas, que han comportado los realojamientos y la crisis sanitaria de la Covid-19 y, posteriormente, por los trámites para expropiar las viviendas afectadas.

La inversión total realizada a Ca n'Anglada llegará casi a los 17 millones de euros, financiados al 50% entre la Generalitat y el Ayuntamiento. El objetivo final del proyecto de esponjament es reducir la densificació en este barrio para mejorar las condiciones de vida, ambientales y sociales.

Con el escombro de los dos últimos bloques correspondientes a la Fase 3B se completarán totalmente las actuaciones acordadas al primer convenio, firmado en 2012. Sin embargo, quedarán pendiente de ejecutar los proyectos de urbanización definitiva de los cuatro espacios liberados, por los cuales habría que establecer un nuevo convenio urbanístico entre ambas administraciones.

En esta década en que se habrá ejecutado el Proyecto de esponjamiento del barrio de Ca n'Anglada, se habrán derrocado 9 bloques con 204 viviendas y se habrán realojado 147 familias, una tarea gestionada directamente desde la Oficina de la Esponjament de Can el Anglada, situada en el Centro Cívico Montserrat Roig, integrada por el Ayuntamiento y el Instituto Catalán del Suelo, INCASÒL, para buscar soluciones consensuadas en los problemas que planteaban las personas propietarias y también las residentes.

Un proyecto en marcha desde 2012

Los problemas en las viviendas del barrio condujeron a una degradación social que hizo necesaria la actuación del Ayuntamiento y de la Generalitat. El objetivo final del proyecto de esponjament de Ca n'Anglada es reducir la densificació de habitantes para mejorar las condiciones de vida, ambientales y sociales. Inicialmente, el proyecto preveía la construcción de nuevos edificios en la avenida del Vallès para hacer los realojamientos, pero la crisis económica lo hizo inviable y se acogieron las familias en viviendas existentes y disponibles del término municipal de Terrassa, tanto nuevos (a través de la Sociedad Municipal de Vivienda) como de segunda mano.

El proyecto se puso en marcha en 2012, con la firma de un primer convenio urbanístico entre ambas administraciones para avanzar en los realojamientos, permitir el escombro de nuevo edificios situados a la zona nordeste afectados por varias tipologías, y determinar los recursos económicos necesarios para ejecutar la primera fase del proyecto.

Los nueve bloques afectados estaban ubicados en la calle de San Damià, 255 bis y 257 bis, Sant Cosme, 198 bis (Fase 1, actual plaza del Pagès), passatge de la Prudència 2-4 (Fase 2), pasatge de la Concòrdia, 1-3 (Fase 3A), passatge de la Previsió, 1, y passatge de la Constància, 2 (Fase 3B).

Ejecución de las fases

Primera fase (2013-2015): Se derrocaron 3 bloques ubicados en las calles San Damià, 255 Bis (febrero 2014), San Damià, 257 Bis (diciembre 2014), y Sant Cosme, 198 Bis (mayo 2015), con un total de 72 viviendas. Ayuntamiento y Generalitat aportaron seis millones de euros, al 50% cada una de las dos administraciones.

Segunda fase (2015-2017): Escombro de 2 bloques situados al pasaje de la Prudència números 2 y 4 (mayo 2017), con un total de 32 viviendas, así como el local comercial del antiguo mercado. Un segundo convenio firmado en 2014 entre la Agencia de la Vivienda de Catalunya y el Ayuntamiento de Terrassa amplió las aportaciones económicas. Se previeron por los años 2015 y 2016 una inversión de tres millones de euros, al 50% cada una de las dos administraciones. Esta dotación permitió culminar las inversiones pendientes de la primera fase y ejecutar la segunda.

Tercera y última fase (2017-2021/25): Escombro de cuatro bloques. Dentro de la Fase 3A son los dos emplazados al pasaje Concòrdia, 1 y 3 (septiembre 2020), y, dentro de la Fase 3B son los ubicados al pasaje de la Previsió, 1, y pasaje de la Constància, 2, con un total de 40 viviendas (previsto por el 2021-22). Un tercer convenio firmado el 2017 recogía una inversión de 7.500.000 euros, por esta fase y también al 50% entre las dos administraciones.